Ahí estaba yo, en la puerta,nerviosa, por fin lo iba a conocer!!!
Tantas noches hablando de este momento, de sentir como acariciaba mi cuerpo con su voz y el momento había llegado y en un instante estaría frente a Él.
Después de estar unos minutos pensando me llené de valentía y llamé, la puerta se abrió y me recibió con su mejor sonrisa.
Me hizo sentarme frente a la mesa, sirvió vino en dos copas y brindamos por nuestro primer encuentro, ese tantas veces soñado.
Acarició mi.nuca, era consc
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